Mi pintura es fruto de la necesidad de transformar la materia a través del arte.
La luz mediterránea, equilibrada y rica, la observación de la naturaleza pero también la mirada hacia mundos interiores hacen que aspire a traspasar en mi pintura las fronteras de lo físico, para mostrar al espíritu que subyace en todo...
Tanto en la obra abstracta como en los trabajos que miran hacia el horizonte, es el color quien hace nacer las formas, dejándolas plásticas, inacabadas casi, para que así el ojo pueda entrar y hacer su propio viaje.